El ayuno intensifica la actividad cerebral
Ayunar es cargarte de energía.
A lo mejor de ahí viene ese refrán de "el hambre agudiza el ingenio".
Pero bueno, esto no es ninguna novedad.
Los beneficios del ayuno en el cerebro era algo que ya conocían en la antigüedad.
Se dice que Pitágoras no dejaba entrar a sus alumnos en clase si no venían en ayunas, porque era la forma en la cual tenían muchísima más claridad mental y aprovechaban mejor sus clases.
Una de las cosas que más rápidamente notamos cuando empezamos a hacer el ayuno intermitente es el aumento de la claridad mental.
Ayunar es cargarte de energía.
A lo mejor de ahí viene ese refrán de "el hambre agudiza el ingenio".